Para conservar la belleza de sus hojas, la cinta necesita mucha luz y humedad. Si la cinta o lazo de amor no tienen suficiente luz y humedad, sus hojas palidecen, se estrechan y se arrugan visiblemente. Lo ideal es regarlas moderadamente cada diez días en invierno y un par de veces a la semana en primavera o verano, siempre procurando no formar charcos. Sin embargo, aunque la falta de riego afea la planta, puede reanimarse al volverla a regar, ya que sus raíces tuberosas son capaces de almacenar agua y aguantar sequías
Lazo de amor
Chlorophytum comosum
De nombre romántico que tal vez se deba a su fuerza y durabilidad, pues con ciertos mimos puede permanecer radiante por generaciones. Lazo de amor una planta también conocida como cinta, por la forma de sus hojas.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.