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Girá las tarjetas para descubrir estas útiles reglas.

La bases de un buen riego...

1- Menos es mejor

Si tenes dudas no riegues

Es más frecuente dañar una planta por exceso de agua que por falta de ella. Siempre hay que chequear el estado del sustrato antes de agregar agua.

2- Primero observar, luego actuar

Es más fácil arreglar la falta de agua que el exceso.

Siempre hay que chequear el estado del sustrato antes de agregar agua.

Los signos que vas a ver en tu planta por falta de agua son los mismos que vas observar si hay exceso de agua. Cuando hay falta de riego es porque el agua no está si no hay daño en las estructura con regar se soluciona el problema, pero cuando hay exceso de riego los signos se notan porque las raíces sufrieron daños y no pueden absorber correctamente, esos daños son irreversibles y la planta deberá crecer nuevas raíces para sobrevivir.

3- Calor = Más riego Frío = Menos riego

Cuando hace calor vas a tener que regar más seguido y si hace frío, con menos frecuencia.

Lo que sucede es que si la temperatura aumenta el agua se evapora más rápido y las plantas se activan por lo que consumen más agua. Si a temperatura baja las plantas disminuyen su actividad y el agua se evapora más lentamente del sustrato.

4 - Drenaje - drenaje - drenaje

Los contenedores siempre deben tener drenaje

El encharcamiento produce falta de oxígeno y facilita la proliferación de enfermedades. Las raíces se ahogan, literalmente.

El tamaño importa

A igual tamaño de planta, en maceta chica, más riego que en maceta grande.

Cuando tenemos una maceta más grande, contiene mayor volumen de sustrato, lo que hace que el agua se consuma más lentamente, por eso a igual tipo de planta si está en un contenedor chico va a necesitar menos agua que en uno más grande.

¿Qué es regar mal?

Regar mal es hacerlo con poca cantidad de agua y muy seguido

Hay más plantas que mueren por riegos inadecuados que por otras razones. La mayoría de ellas prefieren:

quedar bien empapadas con un riego abundante y luego dejar que la tierra se seque un poco, antes de un nuevo riego.

Cuando empecé a cuidar mis propias plantas de interior, seguir este procedimiento fue lo que hizo que la frecuencia con la que perdía plantas disminuyera notablemente!!! Te aliento a que lo pruebes.

¿Por qué a algunas hay que regarlas más que a otras?

Las plantas de interior comparten algo en común y es que deben tolerar recibir mucho menos luz que las plantas de nuestros jardines. De todas formas, cuando comiences a tener más experiencia, vas a notar que algunas necesitan estar siempre húmedas, en ese caso el drenaje es fundamental porque no deben quedar encharcadas. Hay otras que deben secarse casi completamente entre riego y riego (sansiviera, spatifilum), otras necesitan más riego en algún período del año que otro (suculentas). Son ajustes que vas a poder ir haciendo a medida que pases tiempo con ellas y las conozcas. Estas diferencias tienen que ver con el lugar de origen de las plantas y a qué otro tipo de condiciones, a parte de la intensidad de luz recibida, están adaptadas para crecer.